domingo, 5 de septiembre de 2010

Los colores según Goethe


En el libro de Rudolf Steiner: "Goethe y su visión del mundo"
nos dice porque Goethe rechaza la teoría sobre el color de Newton:

"Después de realizar estos experimentos Goehe no puede hacer suyo el punto de vista de Newton. Le sucede con éste lo que con la teoría sobre la preformación de Haller. Así como Haller piensa que el organismo adulto está ya contenido con todas sus partes en la semilla, los newtonianos creen, a su vez, que los colores que, bajos determinadas condiciones, aparecen en la luz, ya estaban comprendidos en ella. Contra esta creencia, Goethe podría volver a utilizar las mismas palabras que empleo contra la teoría de la preformación: "Esta basada en una mera fantasía extrasensorial, en una hipótesis que creemos pensar, pero que no se podra representar nunca en el mundo de los sentidos". Para él, los colores son formaciones nuevas que nacen de la luz, no entidades meramente extraídas de la luz. debido a su "manera de pensar conforme a las ideas" tiene que rechazar el punto de vista de Newton. Éste no conoce la esencia de la idea. Sólo reconoce aquello que realmente existe de hecho; lo que existe de igual manera a como existe lo perceptible por los sentidos, y allí donde no puede probar la realidad mediante los sentidos, lo admite a título de  hipótesis. Dado que los colores se desarrollan en la luz, es decir, que en idea deben estar ya contenidos en ella, cree que estan de hecho contendos en ella materialmente, y que el prisma y la oscuridad limítrofe lo único que hacen es ponerlos de manifiesto. Goethe sabe que la idea es eficiente en el mundo sensible; por ello no traslada nada que exista como idea al ámbito de los hechos. En la naturaleza inórganica el ideal actua tanto como en la órganica, aunque no como forma sensible-suprasensible. Su manifestación exterior es allí totalmente material, exclusivamente sensible. No penetra en lo sensible, no lo trasciende espiritualmente. Los procesos de la naturaleza inórganiza obedecen a una ley, y esta ley se presenta al observador bajo forma de idea. si en un lugar del recinto se percibe luz blanca, y en otro se ven aparcer otros colores, estos significa que existe una relación regular entre ambas percepciones, que puede representarse en forma de idea. Pero si alguien materializa esta idea y la situa en el espacio como una realidad que, como objeto de una percepción, pasa a ser el objeto de otra percepción, esto constituye una concepción groseramente material de las cosas. Esta tosquedad del punto de vista de Newton es lo que repele a Goehte. Es la idea la que transforma un fenómeno inorgánico en otro, y no un elemento físico que se desplace del uno al otro".

FUENTE: Steiner, Rudolf: Goethe y su visión del mundo. Madrid: Rudolf Steiner; 1989.
Capitulo III: La observación del mundo del color.
Los fenómenos del mundo de los colores.
Pags. 168 y 169.

Ilustración de la Teoría del color de Johann
Wolfgang von Goethe

Material aportado por la profesora de plástica Elsa

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